El Aloe Vera es una planta de hojas carnosas y espinosas que crece en climas desérticos como el sur de Estados Unidos y Méjico. Existen dos variedades: el Aloe barbadensis y el Aloe ferox. De las hojas se extraen dos productos, el gel, obtenido al exprimir la hoja de la planta y el acíbar. El jugo es un líquido viscoso de color blanco amarillento. Filtrándolo se obtiene el jugo sin parénquima. Un subproducto del jugo es el acíbar, obtenido tras la concentración del líquido. Se trata de una masa oscura y amarga.
Los principios activos son polisacáridos y antraquinonas (aloína, alanósidos y aloe-emodol), a los que debe sus propiedades. En dosis bajas (1-2 cucharadas) el aloe es estomacal y colagogo. En dosis medias (3-4 cucharadas) es un laxante que actúa sobre el intestino grueso. En dosis elevadas, el Aloe vera resulta un purgante natural. Se le han atribuido multitud de curaciones casi milagrosas de úlceras y colon irritable, ya que es un buen cicatrizante.
Ingredientes:
Jugo procedente de hojas frescas de aloe vera de cultivo ecológico, ácido cítrico, sorbato potásico y benzoato.
NO CONTIENE ALOINA.
Modo de empleo:
Tomar 15-30 ml dos o tres veces al día, o bien emplear como tónico sobre la piel o pelo limpios danto un ligero masaje dos veces al día.
Es rico en vitaminas y minerales
El Aloe Vera contiene muchas vitaminas como A, C, E, ácido fólico, colina, B1, B2, B3 (niacina), B6. También es una de las pocas plantas que contiene vitamina B12. Algunos de los 20 minerales que se encuentran en el Aloe vera incluyen: calcio, magnesio, zinc, cromo, selenio, sodio, hierro, potasio, cobre, manganeso.
Contiene aminoácidos y ácidos grasos
Los aminoácidos son los bloques de construcción de proteínas. Las estimaciones de los aminoácidos que se encuentran en el aloe son de 18-20 aminoácidos. El aloe vera también incluye toda una gama impresionante de ácidos grasos. Aloe contiene tres esteroles vegetales, que son importantes ácidos grasos de colesterol – HCL (lo que disminuye las grasas en la sangre), el campesterol y B-sitosterol. Todos son útiles para reducir los síntomas de las alergias y la indigestión. Otros ácidos grasos que tiene son: linoleico, linolénico, mirístico, caprílico, oleico y palmítico.
Ayuda a la digestión
La mala digestión está relacionada con muchas enfermedades. Un tracto digestivo que funciona correctamente es una de las claves de la buena salud. El aloe es conocido para calmar y limpiar el tracto digestivo y ayudar a mejorar la digestión. También ayuda con el estreñimiento o la diarrea, ayudando a regular tus ciclos de eliminación. Esta gran planta ayuda a disminuir la cantidad de bacterias dañinas y en nuestro intestinomanteniendo tu flora intestinal saludable y en equilibrio. El aloe es también un vermífugo, lo que significa que ayuda a liberar el cuerpo de los gusanos intestinales.
Desintoxicación
El Aloe Vera es un alimento vegetal gelatinoso, al igual que las algas marinas y semillas de chía. El principal beneficio en el consumo de alimentos de origen vegetal gelatinosos en tu dieta es que estos geles se mueven a través del tracto intestinal, absorbiendo y eliminando toxinas. Esto ayudará a desintoxicar tu cuerpo.
Alcaliniza tu cuerpo
La enfermedad no se puede manifestar en un ambiente alcalino. El aloe vera alcaliniza el cuerpo, ayudando a equilibrar los hábitos alimentarios excesivamente ácidos.
Ayuda a la pérdida de peso
Al mejorar la digestión y desintoxicar tu cuerpo va a tener un efecto secundario y perderá de peso, al mismo tiempo tendrás mucho más energía.